La Nueva Trova perdió a uno de sus más queridos testimoniantes con la muerte de Luis Hernández (El Plátano), carismático fotógrafo que desde los mismos inicios de este movimiento dejó constancia y puso de relieve la labor de los trovadores cubanos.
Al definir su contribución, el poeta y cineasta Víctor Casaus, director del Centro Pablo de la Torriente Brau, afirmó: "Fotógrafo espontáneo que con su trabajo ha realizado una antología visual de la Nueva Trova".
En la tarde de ayer un grupo de trovadores y amigos se reunieron en el Cementerio de Colón para decir adiós, desde la guitarra, a este incansable artista de la Nueva Trova que lega una prolífica obra documental mediante las fotos e imágenes audiovisuales, que sirven de memoria histórica de esta importante manifestación de la cultura cubana. (RC)
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